267. Aprender español:
El método de los 10 minutos
Tu sueño es hablar español con fluidez. Y eso está genial. Querer algo con tantas ganas es un buen comienzo. Pero tus buenas intenciones no siempre son suficientes para llegar a esta meta. ¿Alguna vez te ha pasado que estabas estudiando mucho, mucho… aprendías español, aprendías español, dos días, cuatro días, y luego un día no hiciste, al día siguiente también te olvidaste de estudiar, y así pasaron semanas durante las cuales ni siquiera tocaste el español?
Y luego, otra vez te entraba la motivación y te ponías a estudiar español, y aprendías español, aprendías español, dos días, tres días, y luego otra vez lo dejabas, pensando “Ya estudiaré mañana”. Pero dentro de ti te sentías mal por tirar la toalla, te sentías mal por abandonar.
Es importante saber por qué pasa eso. Pero más importante aún es preguntarse: ¿qué hacer, qué estrategia utilizar para que esto no te vuelva a pasar?
Si eres de los que les cuesta establecer una rutina exitosa de aprendizaje, si abandonas a la primera de cambio, si dejas tus proyectos en pausa cuando la vida te echa demasiado encima, tengo una buena noticia para ti. Hoy te propongo un método sencillo para que esto no te vuelva a pasar. Un método infalible para que consigas tu sueño de hablar español con fluidez. Hablar español como si fuera tu lengua materna.
Si me escuchas por primera vez, soy Karo Martínez y esto es Español Automático, un podcast que te ayuda a pasar del estado pasivo de entender español al estado activo de hablar español con facilidad y sin esfuerzo.
Pero antes de ponernos al lío, quería hacer un rápido comunicado. Vamos a cerrar las puertas de nuestro curso “Entender conversaciones en español”, y a partir de ese momento, el curso estará restringido solo para los alumnos que ya estén inscritos.
Probablemente cerraremos las inscripciones en septiembre y solo podrán acceder los alumnos que ya estén inscritos, nadie más. No admitiremos alumnos nuevos y no tenemos intención de volver a abrir las puertas. Si quieres mejorar tu comprensión y ser capaz de entender el español hablado a cualquier velocidad, entonces esta es tu última oportunidad para inscribirte en el link EspanolAutomatico.com/ece-curso
En el curso aprenderás exactamente las mismas tácticas que usé yo para entender a los nativos independientemente de la velocidad o del acento y, al mismo tiempo, ampliando mi vocabulario de manera increíble. Y todo ello organizado en un vídeo-curso que te muestra paso a paso cómo conseguirlo en poco tiempo. Repito el link: EspanolAutomatico.com/ece-curso
A los alumnos de mis cursos siempre les repito que hay tres claves para el éxito:
1.Saber lo que hay que hacer (claridad)
2.Hacerlo bien (ejecución)
3.Hacerlo siempre (constancia)
Claridad. Ejecución. Constancia. Hoy vamos a ocuparnos del tercer punto: la constancia. Quiero que te des cuenta de que cada acción (y cada no-acción) que tomes ahora afectará a tu futuro de forma asombrosa. Y digo: cada acción y cada “no-acción”, porque no hay medias tintas en el mundo del aprendizaje de idiomas.
(*medias tintas = coloq. Soluciones, respuestas o hechos imprecisos). No hay medias tintas en el mundo del aprendizaje de idiomas: lo que hagas o no hagas hoy tiene resultados en tu español. Cada acción y cada “no-acción” tienen repercusión en tu nivel de español. Las acciones o suman o restan.
Y, como digo siempre: el éxito es la suma de pequeñas acciones repetidas día tras día. Mejorar solo un 1% al día. Ser un 1% mejor cada día.
Lo interesante es que todos queremos una transformación positiva, ¿no es verdad?
Todos queremos una mejora radical, un éxito rápido, pero no nos damos cuenta de que los pequeños hábitos y las pequeñas decisiones nos están transformando todos los días. Aunque sean muy pequeños, marcan una diferencia, tanto para bien como para mal. Las acciones o suman o restan.
“Eh, un momento, Karo. ¿Qué quieres decir con que las acciones o suman o restan?”
Ah, me alegro de que me lo preguntes, campeón. Hablo aquí de las pequeñas mejoras, de mejoras tan marginales que cualquiera podría despreciarlas. Pero repetidas día tras día, su poder no solo suma, sino que se multiplica. Nuestras acciones generan un “interés compuesto”.
Es decir, si mejoras solo un 1% al día, al cabo de un año serás 37 veces mejor. Pequeños cambios, resultados notables.
Pero, ¡ojo! A la inversa es peor. Mucho peor. Porque si empeoras un 1% cada día, al final de un año habrás llegado casi a cero.
Hay veces que resulta fácil medir una mejora, pero ¿cómo mides que has mejorado tu fluidez un 1%? Para no romperte la cabeza, empieza con algo fácil de medir: el tiempo. Para ser un 1% mejor cada día: dedica un 1% de tu tiempo diario a aquella actividad en la que quieres mejorar. En tu caso: la fluidez en español.
Un cálculo rápido me indica que un 1% de tu tiempo despierto son 10 minutos (asumiendo que duermes 8 horas).
Si dedicas 10 minutos al día, estás dedicando un 1% del tiempo de tu día a mejorar tu fluidez en español. Y no puedes poner ninguna excusa de “no tengo tiempo” por diez míseros minutos. Emplea cada día 10 minutos para practicar hablar español de forma activa y…
Al cabo de una semana habrás dedicado 1 hora y 10 minutos.
Al cabo de un mes habrás dedicado unos 300 minutos, que son 5 horas.
Al cabo de un año habrás dedicado 3.650 minutos, que son unas 60 horas.
Mira, te puedo dar un ejemplo de mi vida. Como bien sabes, si estás apuntado a mi newsletter, este año en Español Automático estamos cambiando de plataformas porque queremos ofrecer mejores materiales y mejores herramientas a nuestra tribu de Español Automático. Y con tantísimo trabajo, sin parar, sin parar, siempre corriendo con la lengua fuera, me resultaba difícil ponerme a estudiar mis idiomas. Ya no sabía qué hacer. Hasta que un día decidí dedicar solo un 1% para mis idiomas. Empecé con el francés y funcionó a las mil maravillas.
El truco de ponerme solo diez minutos funcionó muy bien. En realidad, a veces estudiaba más tiempo. Tengo aquí apuntados los tiempos de mis primeros días, y eran: 10, 11, 23, 15, 27, 22, 10, 10, 10, 15, 22, 11, etc. Como puedes ver, no he fallado ningún día, porque mi objetivo era un 1%, es decir, 10 minutos. Hacer más, si puedes, está genial. Pero, aunque solo hubiera hecho diez minutos cada día, habría cumplido y lo habría celebrado. Usé una app de seguimiento de hábitos para marcar los días en que cumplía con mi objetivo. Y mi cadena crecía.
Aquí la regla es: todos los días. Hacerlo siempre (constancia). No rompas la cadena. El éxito es la suma de pequeñas acciones repetidas día tras día. Mejorar un 1% al día. Cada día: lunes, martes, miércoles, jueves, viernes, sábado, domingo, las fiestas, el cumpleaños de mi amigo, el día de la boda de mi prima… sin excusas, sin excepción.
Recuerda, campeón: la suerte sonríe a los persistentes. ¿Por qué a los persistentes? Porque el éxito es la suma de muchos miniéxitos repetidos día tras día. Día tras día. ¿Estamos? Esa es la clave.
Cuando Mauro me decía: “Salgamos a dar una vuelta”. Yo le decía: “Vale, pero primero voy a hacer mi 1% de mejora”. O me llamaba mi hermana justo cuando yo me ponía a estudiar, y entonces le decía: “hablamos dentro de 10 minutos, que tengo que hacer mi 1% de mejora”.
Campeón, si te gusta la idea y quieres ponerla en práctica, no dejes que otros te impidan cumplir con el 1%. Si crees que puedes salir hoy con un amigo a tomar una cerveza y que ya mañana estudiarás 20 minutos para recuperar tu 1% perdido… no te hagas ilusiones. No se trata de: “Hoy no haré nada y mañana haré 20 minutos”. No. El interés compuesto no funciona así.
Si cumples con el 1% todos los días, hablarás español con fluidez. Es tan sencillo como eso.
Y por favor, no me digas que no tienes tiempo. No puedes poner como excusa la falta de tiempo por diez míseros minutos. Si te tomas en serio tu objetivo de hablar español con fluidez, encontrarás los 10 minutos.
A los alumnos de nuestros cursos siempre les digo: eso de que no puedes encontrar el tiempo para practicar tu español es mentira. No digas “hoy no he tenido tiempo para el español”. Eso no es verdad.
No se trata de “falta de tiempo” sino de PRIORIDADES. La verdad es que “no tienes tiempo para tu español” porque el español no está lo suficientemente arriba en tu escala de prioridades. Y por eso siempre te falta tiempo, ¡por eso procrastinas! Si algo es lo suficientemente importante en tu lista de prioridades, encuentras tiempo para ello. Porque, simplemente, eliminas algunos quehaceres que no te aportan nada y, de esta manera, encuentras el tiempo para tus prioridades.
Quizás esta sea una verdad difícil de tragar, pero soy tu profe y mi labor también consiste en decirte la verdad, aunque resulte incómoda. Muchas veces, detrás del “no tengo tiempo” simplemente se esconde nuestro “Yo Procrastinador”.
Vale. Entonces, ya lo tienes: un 1% mejor cada día. Una pequeña ACCIÓN cada día.
Fíjate que digo “ACCIÓN” y no “movimiento”. Hay una gran diferencia entre acción y movimiento. Estar en movimiento produce la falsa sensación de que progresamos sin riesgo de fracasar. Si ves vídeos didácticos en YouTube, consumes información y tienes la sensación de que progresas, pero si no lo aplicas… no te sirve de mucho.
Tomar acción produce resultados. Aplicar lo aprendido en un podcast o en un curso es tomar acción. Hay riesgo de fracasar, pero nos responsabilizamos y estamos en el buen camino.
Tengo dos indicaciones que te ayudarán a distinguir entre acción y movimiento.
INDICACIÓN 1: la acción siempre es ACTIVA. Estudia de manera ACTIVA. Escuchar un podcast está bien. Ver un vídeo está bien. Pero si tu objetivo es hablar con fluidez, solo escuchar no basta. Tienes que hablar. Practica con ejercicios cortos, pero potentes, como el Juego de Preguntas y Respuestas o el Activador de fluidez. Estos ejercicios los he diseñado de manera que te traigan 10 veces más resultados que cualquier otro ejercicio. Por eso les llamo los Ejercicios de Alto Impacto, porque practicando tan solo 10 minutos con Ejercicios de Alto Impacto obtienes más resultados que viendo vídeos de YouTube o series en Netflix durante una hora.
INDICACIÓN 2: La repetición es la clave
¿Qué más puedo añadir a este punto que no te haya dicho ya en los podcast anteriores? Quizás… eso: no te dejes engañar por la “ilusión de fluidez”, por la “ilusión de competencia”. Cuando quieres repetir una vez más el Juego de Preguntas y Respuestas y tu mente te susurra: "Pero esto ya me lo sé. Ya me sé esta lección"… Cuando se trata de aprender idiomas, no lo sabes todo haciendo el JPR solo una vez. Haciendo el JPR dos veces, cuatro veces, es cuando se ve una gran, gran, gran diferencia.
No hace falta que repitas el JPR el mismo día. Puedes volver a hacer ese mismo juego unos días después o una semana más tarde. Pero con la repetición realmente empiezas a captar las cosas que te perdiste antes. Es una parte fundamental en tu nueva rutina de mejora diaria del 1%: hacer repeticiones y repasos regularmente.
¿Cómo te recomiendo que lo hagas?
Accede al audio y la transcripción del JPR en: Espanolautomatico.com/juego. La primera vez intenta jugar sin mirar la transcripción. Pausa el audio cuando lo necesites y apunta en tu cuaderno desastre cosas que te llaman la atención, cosas que has notado, si has respondido bien, o dónde te has equivocado. Toma notas.
La segunda vez juega con la transcripción cerca, para consultarla cuando te equivoques. Analiza la transcripción, fíjate en cómo está construida la frase correcta.
La tercera vez juega sin la transcripción. Has notado que has mejorado un montón, ¿verdad? Sí, esa es la magia de la repetición.
Sigue trabajando con el mismo JPR varias veces. Intercambia el modo de trabajar: a veces, trabaja solo de oído; otras veces, consulta en la transcripción algunas frases cuando lo necesites. Y déjame un comentario contándome cómo te ha ido. ¿Qué mejoras notas? ¿Cómo cambia la confianza con la que hablas? ¿Notas que cada vez respondes más y más rápido? ¿Notas que respondes con más precisión?
Venga, te desafío a que pongas en práctica este sencillo plan de acción: trabajar con el mismo JPR 4-5 veces. Te recuerdo que lo tienes gratis en: Espanolautomatico.com/juego
Resumiendo lo que has aprendido hoy.
Hay tres claves para el éxito:
1.Saber lo que hay que hacer (claridad)
2.Hacerlo bien (ejecución)
3.Hacerlo siempre (constancia)
En cuanto a la constancia, la manera infalible para aplicarla en tu aprendizaje de español es mejorar un 1% cada día. Pequeñas acciones, resultados notables. Si mejoras solo un 1% al día, al cabo de 1 año serás 37 veces mejor. Pero, ¡ojo! Si empeoras un 1% cada día, al final de un año habrás llegado casi a cero.
No olvides que hacer una acción no es lo mismo que estar en movimiento. Una acción que te permitirá avanzar hacia tu objetivo de hablar español con fluidez tiene que reunir dos características:
1- Tienes que ser ACTIVO estudiando.
2- La repetición es la clave.
Cada acción (y cada-no acción) que tomes ahora afectará de forma asombrosa a tu fluidez. Imagínate lo que pasaría si aplicaras mi “Método de 10 minutos” todos los días durante tres o cuatro meses. Créeme que si hablamos dentro de 3 meses, tu nivel será la leche.
Ah, y no te olvides de que pronto cerraremos las puertas al curso “Entender conversaciones en español”, un sistema completo diseñado para que puedas comprender a cualquier nativo, sin importar su acento o la velocidad con la que hable. No dejes escapar la última oportunidad para apuntarte en el link:
EspanolAutomatico.com/ece-curso
Nada más. Muchas gracias por escucharme. Como siempre, ha sido un placer inmenso compartir contigo este rato. Cada momento de la vida importa. Así que: Carpe Diem. Aprovecha el momento, campeón, y haz que tu vida sea extraordinaria.